La leche de almendras o bebida de almendra es una receta muy sencilla, rápida de hacer y queda mucho más sabrosa que la que se compra en supermercados o herbolarios.
La leche de almendras sólo lleva agua y almendras, pero la podemos aromatizar a nuestro gusto. Le podemos añadir lo que queramos, es cuestión de ir probando lo que más nos guste. En este caso le he puesto canela y vainilla.
Esta leche es ideal para celiacos, intolerantes a la leche y para quien esté siguiendo una dieta anti cándidas.
Ingredientes para 1 litro:
- 1 litro de agua
- 90 g de almendras naturales
- Canela al gusto
- Vainilla al gusto
Preparación de leche de almendras casera:
Tenemos que dejar las almendras en remojo al menos 8h, yo las suelo dejar toda la noche.
Cuando vayamos a hacer la receta las colamos y enjuagamos. Para pelarlas bien ponemos un cazo con agua al fuego, y cuando esté a punto de hervir echamos las almendras y las dejamos 1 minuto, las colamos y ya las podemos pelar con facilidad, solo hay que pellizcarlas y la piel saldrá sola.
Ponemos medio litro de agua en el vaso de la Thermomix o similar (cualquier batidora potente), añadimos las almendras peladas, la canela y la vainilla. Tapamos y trituramos todo a máxima velocidad durante unos 3 minutos, entonces añadimos el resto del agua y trituramos otros 2 o 3 minutos.
Colamos con un colador de tela o malla fina… ¡y listo!
La leche de almendras nos aguanta en la nevera 4 o 5 días.
Los restos de almendra que nos han quedado en el colador los podemos utilizar para otras recetas, incluso los podemos congelar.
